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Cuando pasamos mucho tiempo en el agua, ya sea en la piscina, la bañera o en cualquier otro lugar, nuestros dedos y la piel en general tienden a arrugarse. Este fenómeno fue objeto de investigación, y aunque no se comprende del todo, existen algunas teorías al respecto.
Una de las explicaciones más aceptadas sugiere que la piel arrugada es una respuesta adaptativa del cuerpo al agua para mejorar el agarre en ambientes húmedos. La hipótesis es que las arrugas proporcionan canales que permiten que el agua drene más fácilmente de las superficies de la piel, ayudando así a mantener un mejor agarre de los objetos mojados.
Los estudios han demostrado que las personas con los dedos arrugados por estar en el agua se desempeñan mejor en tareas que requieren manipular objetos bajo el agua en comparación con aquellos cuyos dedos no se arrugan. Esta adaptación temporal podría tener beneficios evolutivos relacionados con la supervivencia y manipulación de objetos en ambientes acuáticos.
Si pasamos más de media hora en el agua es muy probable que nuestra piel se haya arrugado. En ese caso, se recomienda esperar a que vuelva a su estado natural. Esta sensación desaparecerá por sí sola una vez que te alejes del agua y tu piel se seque.
Después de secar tu piel, puedes aplicar una crema hidratante para ayudar a restaurar la humedad natural de tu piel. Esto puede ser especialmente útil si estuvieras en el agua…
La Revista Pronto fue un semanario argentino de periodismo fundado el 7 de agosto de 1996 por Publiexpress S.A. en Buenos Aires, con distribución en Argentina y Uruguay, ahora se presenta de manera digital como sitio web.
